lunes, 12 de diciembre de 2011

Días tristes.

No puedo más, estas son las palabras que han repetido mis labios estos días, los días en los que no he sabido  nada de ti, los días que llevo sin mirar tus ojos color miel.
Mi corazón dormido, ha dejado de latir, llorar y recordar, ha sido lo único que he estado haciendo e incluso estoy haciendo ahora mismo al escribir estas pocas palabras que tanto me ayudan para expresar mi estado de ánimo que a nadie le gusta ver en mi.
Me faltan tus besos, tus abrazos, susurros, lo asumo y sigo presa de este anhelo.
Y sin querer no quise, no conseguí dejarlo de lado, mi estrella se ha apagado. Ni mi mente ni mi corazón quieren entender; ni hacen nada por intentar al menos comprender que ya no estás conmigo, que hemos dejado lo maravillosa que era mi vida junto a ti.
Y aquí me quedo, sola, intentando asimilar, intentando seguir, pero no puedo, quiero buscar un mundo en el que me pueda arropar y olvidarme de este dolor tan grande que tengo aquí, dentro de mi.
Aún sigo extrañándote, no he dejado de pensarte pero me gustaría ver la luz, una vez más que sea para poder encarrilar mi vida.
Soy consciente de que me haces feliz con sólo una palabra que salga de tus labios, esos labios que recorrieron mi cuerpo y caricias que quedaron atrás, pero están presentes aún en mis recuerdos.



No hay comentarios:

Publicar un comentario